Barón Rojo. Monográfico, parte 2.

El útimo planeo del Barón.

     … Y aquel pájaro de acero que surcaba el Olimpo del Heavy Rock empezó a descender a los infiernos… Continuamos la historia de Barón Rojo con esta segunda y última entrega del monográfico (lee aquí la primera). Nos habíamos quedado en la época del álbum «En un lugar de la marcha»

1986 fue un momento convulso en lo interno. Expiraba el contrato con Zafiro y el cuarteto tenía muchas ilusiones depositadas en fichar por la mayor EMI,  pero  lastimosamente queda en nada. Otro motor averiado, un gran palo. Ello, unido al auge de otros estilos musicales,  hizo que la escena se resintiera y los propios Barones entraran en barrena, traducido en relativa pérdida de interés de fans , pérdida de caché, menos shows y mal pagados, pésimas relaciones entre los músicos y mala gestión del management y compañía.
 
Barón ya no conseguiría su sueño de surcar otros cielos y de aterrizar en aeropuertos internacionales de forma estable. Sí prosiguió con sus giras exitosas por diversos países latinos. Todo se condensó en intentonas, en esfuerzos frustrados, siendo otro clavo más en el ataúd, en su caja negra. Eso debió pesar y mucho en el seno de la banda, porque veían que sus posibilidades de crecer se desvanecían, que empezaban a ver el espejismo y masticar polvo de cruda realidad, encontrándose en Tierra de Nadie…
 

     Mítico Barón, ¿dónde quedó el vuelo fugaz de tu gran avión?

 
Acrobacia 5. Vuelo plano, vagando sin rumbo fijo. 
Ruta: Año 1987.
 

     Con “Tierra de nadie” la ruta se torna turbulenta, desértica…

     Para mi, “Tierra de nadie”, “Pico de oro” y “Pobre Madrid” son las canciones más reseñables de este quinto álbum de estudio, ya apurando el combustible de las ideas. Se repiten temáticas y situaciones como en “Señor Inspector” o “Pico de oro». Por otra parte, comentar que la banda continúa (y seguirá hasta reventar) con la fórmula disco-gira sin respirar casi y eso agota a cualquier artista. Sin embargo, este quinto disco se funde en oro igualmente, el último, y con ello salvan la ruta.
 
                    El Ministro J. Moscoso en la mejor época baronil. Vendrán tiempos de cambios, travesía en el desierto…
 
“No perteneces a una facción
no crees en dogmas de religión
lo mas probable será
que creas solo en ti…”

» No va más, Junto a Tierra de Nadie y Obstinato, las tres últimas ráfagas de nuestro valeroso aviador, las tres más de fogueo que otra cosa.»

Acrobacia 6. Iniciando aproximación a tierra. 
Ruta: Año 1988.
 

      Y es que “No va más” ya no iba a más, el Barón no se sustentaba más en el aire, en sus nubes de acero. ¿Qué podemos decir de esta pirueta? Pues que fue su segundo trabajo autoproducido, publicado en junio de 1988, ya con unas deterioradas relaciones con su manager Jesús Caja (dejó la banda tras la gira americana, en noviembre del ´88) y que por primera vez las ventas no llegaron al disco de oro.

 
     Para Mariano Muniesa es “el (disco) menos afortunado” de la etapa clásica del Barón. Ahí, ahí andará con “Tierra de nadie”, bajo mi perspectiva, y junto a “Obstinato”, las tres últimas ráfagas de nuestro valeroso aviador, las tres más de fogueo que otra cosa.
    Contiene este cartucho una pieza preciosa, en clave poética y de introspectiva, gran trabajo de imaginación y de connotación futurista, un viaje astral, como es “Mil años luz (agujeros negros)”. Por momentos no sabemos si quien narra, viaja por el espacio interestelar o lo hace en una cápsula intravenal de esas que hemos visto en pelis.
     También digno el corte “El Gladiador”, para mi con su punto especial por el tema que aborda, el de los fanáticos del fútbol, los `ultras´, los hinchas que viven esa pasión como un modo de vida, pero no los hooligans violentos, sino aquellos que disfrutan dando color a la grada con los denominados tifos. Yo fui uno de ellos durante una década.
¡Qué bien hilada está esa historia! de un día de domingo futbolero donde se recogen los momentos más intensos del frenesí que siente el protagonista, antes, durante y después de la jornada.
     La que abre el elepé, “Travesía urbana”, es otro ejercicio, quizá de los últimos ya, de capacidad para idear una historia peculiar, imaginando y esculpiendo una ciudad-mar, Madrid , a través de versos metafóricos con fina pluma. Te transporta a ese negro mar…
 

“Arrecifes de hierro y hormigón,
restos sucios de un barco que se hundió.
Este viaje toca a su fin,
regreso al puerto del que partí.
Desarbolada mi nave a la deriva va,
soy navegante que explora el negro mar de mi ciudad.
Travesía de Ventas hacia Colón, Callao, Retiro y Bilbao;
Una luz me guió rumbo al hogar, y allí logré recalar.”

Grabando «No va más», momento relax.

      Y por último podemos decir que hay un par de temas que sin ser “canela fina” sí que pueden ser dignos: “Carga y descarga” (símil amoroso con una batería) y “Celtas cortos” (con lo exótico del violín chino) pero claro, comparados con otras piezas de antaño, se quedan en meras y simplonas composiciones.
Acrobacia 7. Apurando el combustible.
Ruta: Año 1989.
 
Obstinación: del latín obstinatio, -onis.
1. Pertinacia, porfía, terquedad.
2. Exasperación.
3. Tedio (aburrimiento).
 

      Quiero tildar más de terco que de tedio este “Obstinato”, que supuso la última pizarra con firma de los cuatro barones originales. La inspiración seguía en caída libre, lamentablemente, y ninguna tentativa por reflotar la aeronave, de remontar planeo, tendría éxito ya.

«El intento fue consciente, meditado, aferrándose a un paracaídas con múltiples rotos en la tela rojiblanca. Terminaban contrato con su bestia negra, con “Zafiro”, y un buen lanzamiento podría abrir esa posibilidad… pero nada se conjuró para ello.»

Hasta la portada tuvo que ser reelaborada por el propio Sherpa quien afirma que la original fue un esperpento (nula colaboración, nuavemente). El nuevo manager no estuvo a la altura de lo esperado con gestiones deficientes, el disco apenas tuvo repercusión (recordemos que el Heavy Clásico vivía mala época con el momento álgido de bandas de Rock Urbano como Barricada o Los Suaves en España y el Grunge a puntito de caramelo, empalagoso), flojo en ventas, el caché del grupo fue cayendo así como el número de actuaciones, y todo ello unido a la metástasis de las nefastas relaciones internas, hizo que finalmente se llegara a lo que nadie jamás hubiera deseado, la separación, con un Barón estrellado, que no en el estrellato.
     Y sucedió así, como se narra en la única biografía escrita sobre la formación más famosa de nuestro Rock Metal (son dos del mismo autor, realmente, la segunda ampliada).

El 05/12/1989 fue el último show, el postrero planeamiento del Barón clásico y seis días después, el 11 de diciembre de ese fatídico año, Sherpa y Hermes anuncian el abandono del grupo en un conocido programa radiofónico de temática especializada. 

     Hasta casi dos décadas después no se producirá el hecho más deseado por la basca rockera del país y latinoamerica: la reunión, el re ensamblaje del fokker, la reconstrucción del pájaro de hierro más representativo de nuestra música, el mito del Barón Rojo. ¿Podría llevarse a cabo semejante empresa? ¿en qué condiciones? ¿cómo aconteció? No nos adelantemos.
     Analicemos primero, como venimos haciendo en este especial, las canciones que consideramos esenciales dentro de este obcecado álbum y las circunstancias singulares que pudieran darse. En lo personal, como ya comentaba en la introducción del reportaje, para mi “Obstinato” significa la obra con la que descubrí verdaderamente a Barón Rojo (sin contar canciones sueltas escuchadas años antes), por eso le guardo un especial cariño.

    Sin ser un disco notable, sí que encuentro en él tracks resultones y una espléndida balada como es “Herencia letal”, la versión sosegada pero igualmente iracunda por la denuncia que hace, de aquella herencia del disco “Metalmorfosis” que no pudo ser incluida en el mismo y que afortunadamente fue rescatada aquí en otro formato. La defensa del medio ambiente, de nuestro entorno, ya en la década de los ochenta mermado y con cada vez más benefactores de la causa verde (bandas como Asfalto o Tiburón reivindicaban la misma), ensalzada esa lucha de forma magistral, lanzando un valiente y contundente alegato contra el progreso desmedido y salvaje del capitalismo.

                                           Foto extraída del portal Todo Colección. 
 
“El mundo es sólo una transacción
que te enriquecerá si lo sabes manejar
lo que coméis es de calidad y sin adulterar
se envenenan los demás…
…y el equilibrio natural se hace desolación
¿qué pensarán al descubrir que su herencia era mortal?
…Si alguna vez oyes decir que alguien quiere resistir,
piensa que puede fracasar tu avaricioso plan…”

     Enigmática en cuanto a la historia en sí, con punch en lo musical, es la pista “Tren fantasma”, un escalofriante relato siniestro que narra el recorrido en bucle de un tren fantasmagórico, sin andén ni raíl, del que no se sabe quién lo conduce ni hacia dónde se dirige, que recoge personas y del que quien sube jamás vuelve a bajar. 
 
    De esas otras canciones de las que podría afirmar que merecen un detenimiento, sin ser grandes, cito “Colapso en la M-30″, retrato del Madrid monstruoso de las serpientes con forma de carriles y atascos eternos; “Vampiros y banqueros”, con una letra bien descriptiva del sector, y “Paraíso terrenal”, divertida sátira del modo de vida norteamericano, el SueñoUSA.
Como curiosidad, el séptimo disco incluye un corte cantado en inglés por primera vez, versión de un famoso “Get on your knees” de Los Canarios de E. “Teddy” Bautista. Para M. Muniesa es una acertada apuesta que califica de “sencillamente genial”; en mi opinión, es un despropósito, entre el inglés chapurrero de Carlos y lo simplón del propio tema; no aporta nada positivo al global.

«Lo más lógico hubiera sido tomarse un tiempo de reflexión, analizar la ruta que se estaba tomando, repostar combustible y tras esa parada en el hangar, retomar la senda con nuevos bríos y fuerza.»

 

Fin de un vuelo mítico. Separación, fuego enemigo y desafortunada trayectoria del nuevo Barón.
Ruta: Años 1990-2009.
 
     A veces basta una simple frase para entender la situación. En palabras de Joan Singlá, reconocido periodista musical: “Eran una mala versión de algo que había sido muy bueno”.
   Una serie de acontecimientos, cruce de declaraciones que fueron subiendo de tono y guerra de insultos y acusaciones que hicieron leña del avión caído y un distanciamiento insalvable hasta la reunión en 2.009.
    Sherpa y Hermes no comunicaron su decisión de abandonar Barón de viva voz y eso mosqueó mucho a los hermanos.
Parece que la reacción de los fans ante el nuevo fuselaje del laureado aeroplano fue más bien tibia y que lo más lógico hubiera sido tomarse un tiempo de reflexión, analizar la ruta que se estaba tomando, repostar combustible y tras esa parada en el hangar, retomar la senda con nuevos bríos y fuerza. Desde luego, por lo que se puede leer acerca del asunto, la respuesta de Carlos y Armando tildando de «desertores del Rock» a Calabria y a Campuzano, queda bien a las claras que estuvo fuera de lugar.
 
Los Barones pos separación, con el batera Ramakhan, en el centro un fallido vocalista llamado Maxi y Pepe Bao (foto extraída de la web oficial de Barón)
 
      La cuestión fue que los de Castro decidieron tirar millas adelante con nueva formación, y con un vocalista al frente, Maxi (Máximo González, voz de Tritón) que no duró más que unos meses pilotando la voz de sus amos… Al bajo el todoterreno Pepe Bao y Ramakhan a las baquetas. Duró poco este line-up y en el ´91 metió sus manos Niko del Hierro para en 1.992, dos años y pico después de la hecatombe, sacar nuevo material con nombre de “Desafío”, y por supuesto que lo era. El disco pasó totalmente desapercibido (volvamos a recordar que esa época lo que pegaba era el Grunge), con escasas ventas y apoyo en medios. Avispa, su nuevo sello, confirmaría que ese nuevo Barón no interesaba a sus fans de siempre.

Con Niko del Hierro, primero de la foto (foto extraída de la web oficial de Barón)
 
    Por indicar algunas canciones reseñables dentro de lo raspón de esta creación, éstas serían: «Te espero en el infierno»; «Alí Baba y los 40 criminales», no por su música, nada lograda, sino por la valentía de su letra que les costó no entrar jamás en esa emisora (y otras). Fueron vetados, pese a intentos de su sello Avispa. «Noches de Rock and Roll», por un magnífico pasaje instrumental, como siempre, por parte de los Hermanos (lo que mejor se les da); de «El enemigo a abatir» es digno su estribillo y la parte dramática en letra y estirando las notas a las seis cuerdas, poco más (el hilo letrístico se repite, cansa, y se repetirá posteriormente como buen bucle: los de Castro siempre cuestionados, no es de extrañar…) y quizá «Hijos del Blues (generación perdida)» sea la pieza más digna de todas las de este reto de álbum, como si fuera una composición de la época exultante del Barón, como si la magia les hubiera visitado por esos siete minutos de puro Blues/Rock, exquisita, expejismo.

     Tras esta bravata, volvieron a palpar lodo, con problemas de agencia, decaimiento de su popularidad, etc y nos encontramos con un período 1993-1995 muy sombrío y con actuaciones esporádicas, no como antaño.
      En el ´95 editan recopilatorio “Larga vida al Barón” con buena acogida y ventas y parece que la puerta a una posible reconciliación se abre un mínimo, pero según Sherpa, las condiciones no fueran las idóneas. Seguiría todo controlado por De Castro Entreprises, a porcentaje, galas pequeñas sin la infraestructura adecuada para montar un gran espectáculo acorde con el poderío de B.R.
 
     Rechazada la oferta, Carlos y Armando siguieron a lo suyo y parece que remontaron en cuanto a gancho en los directos asentando formación. “Arma secreta” aparecerá en 1997 sin suponer ese acicate y subidón deseado y esperado, aunque a nivel de gira estuvieron decentes, según se desprende de la lectura de diversos artículos de la época.
Canciones reseñables,  alguna digna hay: «Bajo tierra», un recorrido por la vida del metro urbano, un Rock meritorio, con estribillo pegadizo; «Arma secreta», con cierto feeling y unas líneas vocales dignas, que pueden resultar atractivas y  por último «Robinsong», una autoafirmación del ser uno mismo, podría entenderse.
«Lo más lógico hubiera sido tomarse un tiempo de reflexión, analizar la ruta que se estaba tomando, repostar combustible y tras esa parada en el hangar, retomar la senda con nuevos bríos y fuerza.»
     Será en 1999 cuando podamos tener nuevo material sonoro con cuatro temas que regalarían con otro disco-compilación, el “Cueste lo que cueste”, y que en mi opinión sería lo mejor publicado desde la separación, sobresaliendo “Cielo o infierno”, composición de calidad, potente y gruesa desde el principio y una letra inspirada esta vez, abordando el tema de la religión, siempre maquinando contra la Diosa Razón. A mi aquí sí me recuerdan a los míticos Barones. “Más de ti” también podemos considerarla pieza con brío y chispa, destacando los instrumentos de viento como novedad, los cuales copan el desarrollo de la misma, dotándola de frescura (quizá algo repetitiva, pero efectiva).

 
   Esta nueva compilación obtuvo buen resultado en ventas y aceptación. Siguieron con sus shows y giraron nuevamente por Latinoamerica.
Del éxito continuo de los “Best of Barón” parece desprenderse que fueron chispazos que insuflaron vida al grupo de los hermanos, sobre todo cara al directo. Poco más.
De esa época fin de milenio despunta el gran concierto que dieron en La Riviera y del que salió, más que un reportaje, un vídeo en vivo, con una pequeña entrevista al combo y algunos comentarios, elaborado por el programa de televisión 40TV Rock Star. Aquí os dejamos enlace.
«El común denominador de las creaciones del Barón pos separación siempre sería la mediocridad, algunos destellos opacos, pero nunca a la altura de las grandes composiciones de la
época gloriosa.»
    Adelantamos la manecilla del tiempo al año 2001 con nuevo material, “20+”, celebrando las dos décadas en el aire. 
Mejoró, al parecer, las ventas de sus dos predecesores y para el periodista M. Muniesa, es un trabajo digno, pero no opinan igual otros compañeros del gremio. 
  Baste una muesca en la crítica que hacían www.metalbrothers.es para percatarse de la más que consabida pérdida de magia de los Barones sin el otro 50%.
Por si quieres leer más, aquí el enlace
 

«Al menos el álbum finaliza con un tema instrumental que parece que es el único campo donde pueden destacar hoy en día. La realidad la ve cualquiera, sin Sherpa y sin Hermes el Barón vuela a ras del suelo y ni siquera nos motiva que se toquen los clásicos».

      Me ha costado la vida volver a oír este disco, porque es realmente flojo, por calificarlo educadamente. Aún con todas, de esas que apuntamos como dignas, pero siempre ya sin magia: «Vendiendo el juicio final»; instrumentalmente a gran altura, transmitiendo chispa y cierta creatividad. Letrísticamente, menos brillante, con un transfondo ya manido, también por la misma banda («El pedal», «Señor inspector», «Señor censor»… alguien que embauca, se aprovecha, que controla desde cierto estatus y poder…)
     «Quémame con tu piel» es una creación que resulta interesante; de manufactura sensual, temática que no suelen tocar, sí luce fresca.
«Como la letra de un Blues» sí es digna gestación; descolla la sección de viento que la convierte en fresca, la acompaña una pluma cuidada y acertada y musicalmente es lo mejor del disco. La mejor rola del veintemás junto con la final instrumental «Canon-cañon», una delicia en lo que realmente destacan los hermanos. Aquí podéis comprobar:
     Más material fuera de estudios, el DVD “Barón en Aqualung” (2002) y homenaje de bandas nacionales a su trayectoria con “Larga vida al Volumen brutal”.
   Así llegamos a 2003 con “Perversiones”, disco de perversas versiones, pero con un significado opuesta al indicado en la R.A.E. (sumamente malo), porque realmente sacaron un gran puñado de clásicos con el punto Barón. Lástima que fueran eso, obras de otros artistas…

     Obviaremos más datos de su peregrinar, al cielo o al infierno, según se quiera otear el horizonte, para mencionar otro intento de reunión que quedaría en nada. Un bloque de la formación habla de oportunidad perdida, con pingües beneficios en liza (habla Sherpa de 240000 € para cada uno por un disco en directo, DVD y gira y posibilidad de nuevo álbum en estudio) y supuestamente de unas condiciones ventajosas y a la altura, de un regreso por todo lo alto y digno; el otro no habla en similares términos. Se deduce que los hermanos, viendo que no les iba mal del todo en cuanto al directo y a modo de venganza, dijeron “ahora no, perdisteis la oportunidad cuando nosotros os lo ofrecimos”. Sea como fuese, mismo bucle de reproches, insultos, mal rollo y nombre de Barón Rojo manchado de mugriento aceite de motor… todo igual por aquella época. Para los más curiosos/as, la empresa ofertante fue Locomotive Music.

 
                             Distintas formaciones del Barón en estos inciertos años.
 

    Tras un nuevo cedé de éxitos, sacarán en 2006 “Últimasmentes”, material sonoro de nuevo cuño y nuevo fiasco en cuanto a creatividad. Se salva en esta línea de la que hablamos de dignidad sin brillo el de antaño: «Al final caerán», «Tu infierno» y «Rock´n Roll gang».
      Compraron un pasaje a la mediocridad, como ellos mismos dicen en una de las canciones de este trabajo. En picado…

                                 Una de las peores portadas del Heavy Rock nacional.
 
     Volverían a la carga del directo registrado en DVD con “Desde Barón a Bilbao” (2007) con un gran montaje. En ese mismo año saldría de la banda el bajista Ángel Arias, desatándose polémica, en una situación enrarecida (habla mal el músico del trato personal de los hermanos, centrándose en el aspecto humano; se quejaba de que se sentía como una pieza más del engranaje “B.R. conciertos S.L.”). El compañero de parches, Martos, cogería las de villadiego poco después. Ambos fueron sustituidos por Tony Ferrer y Rafa Díaz, respectivamente, quienes duraron menos que una camiseta de ACDC en el Zara…
    El quinto live, éste singular por ser grabado con la sinfónica de Mislata, aparecería en 2008: “En clave de Rock”.
«El Barón Rojo pos separación,entre 1990-2009, se resume en buen estado de forma en vivo pero una deficiente producción a nivel de estudio, con lanzamientos carentes de creatividad y esa marca única B.R.»
El espejismo de la reunión.
Ruta: febrero de 2009 – febrero de 2012.
 
      La noticia estalla en febrero de 2009. Iba a ser una única fecha, en el extinto Metalway Fest de Zaragoza. Algo que choca es que paralelamente a la reunión, a la banda original, a los B.R. Since 1.980, estaba la versión B.R. Aliexpress, con los otros dos miembros no originales, que seguía girando y comportándose como grupo. Parece que ni Carlos ni Armando se terminaban de fiar de que el asunto saliera bien o más bien sabían que iba a ser algo puntual y para aliviar maltrechas economías. En entrevistan dejaron claro que no iban a dejar parado el motor del otro Barón, porque afirmaban les había costado mucho esfuerzo llegar a ese estatus y que Hermes y Sherpa no iban a llegar así como así e imponer nada. Al menos eso se deduce de tales declaraciones de la época.

 
     Lo que iba para algo fugaz, de un único show, se fue ampliando por la demanda existente. En La Riviera hicieron sold out y tocaron una segunda vez en mayo de 2.010 (una primera en enero). Reverdecieron laureles, pasaron por el taller de chapapintura y rejuvenecieron, saliendo de nuevo en medios generalistas.
   El periodista M. Muniesa afirma tajante que fue por problemas económicos que los hermanos de Castro decidieron, al fin, en ese momento, proponer la reunión. Les había salido caro el despido de su anterior bajista y tenían que afrontar costes.
Lo que siempre quedó claro, por declaraciones diversas y sobre todo viendo el documental “Barón Rojo. La película”, es que la estructura de grupo iba a ser la de siempre: Sherpa y Hermes seguirían siendo empelados, músicos a sueldo, sin capacidad decisoria alguna; nada de disco nuevo… Así las cosas, todo era bien previsible… Última vuelo del Barón Reunido, en febrero de 2012 en el Palau Sant Jordi de Barcelona. Al hilo, Sherpa continuó criticando el “cutrerío” de los hermanos, al denunciar que no se contó con un presupuesto en condiciones, no se dispuso de una inversión digna en cuanto a luces, escenario, espectáculo, etc (“la historia se repite…”)


     No es de extrañar, pues, que ese agrupamiento tuviera poco de unión, bastante de pose y mucho de enemistad enquistada. Fue algo anecdótico y en el fondo, triste…

Quedada en el bar para suprimir rencillas, limar asperezas y arrancar con el nuevo Barón… La Reunión 30º Aniversario fue un espejismo (Foto extraída de la web Metalcry.com)

Buen rollo… hasta que todo estalló… (foto web Barón)
 
“Barón, tu triste misión no apagó tu gloria…” o sí…

Barón de Castro is crashed . La caja negra.
Ruta: Años 2010-2018.
 
     Por afinar y no aburrir con más datos sin alma, citar el último trabajo de estudio de Barón Rojo, “Tommy Barón”, la opera de los Who adaptada al estilo de Castro. Un par de veces he escuchado el disco, y ¡tela! no hay por donde cogerlo en cuanto a letras metidas con calzador se refiere. Es un loable proyecto pero en mi opinión nada afortunado.

     Simplificando al máximo este última etapa de lo que fue un mito, me retrotraigo unos meses. Lo último que he visto del Barón Rojo de los de Castro fue el 5 de mayo 2018 en el Festival Sevilla Urbano. El mayor despropósito vocal que he presenciado del grupo. Carlos no podía con su voz, apagada, rota, un espejismo de lo que fue otrora en sus buenos tiempos. Daba pena oírle, daba lástima y rabia contemplar el vuelo de ese Barón. Armando intuyo que ya iría asumiendo mayor protagonismo en las voces y en esta ocasión tuvo que emplearse a fondo.
«Siguen sin contemplar la posibilidad de ceder el micro a un vocalista de calidad que dignifique las canciones del grupo; sería  la menos mala de las soluciones al desplome que continúan experimentando.»
     Iba a narrar, al hilo, cómo viví su show del Leyendas 2013, la penúltima escaramuza, pero va en consonancia con lo aquí comentado, quizá no tanto desde la perspectiva vocal sino, paradójicamente, instrumental, porque fue soporífero el concierto, con solos alargados hasta la extenuación, muchos temas del «Tommy Barón»…
      Sí, desde la perspectiva instrumental no se les puede echar nada en cara; quizá, y esto es un apunte mío, el que los solos y partes instrumentales las estiran en demasía en algunos temas, pero por lo demás, la calidad que atesoran en sus dedos y mente los hermanos, con ese sonido genuino marca de Castro, que marcara una época sin parangón, sigue intacta y es lo que les salva las actuaciones.
     Me hubiera gustado mostrar otra perspectiva, otra realidad del que fuera grupo estrella de nuestro Heavy Rock patrio, pero tras la separación ya sabemos cuál ha sido el rumbo del Barón. ¿Qué futuro depara al que fuera avión de combate por excelencia? 

Miscelánea, curiosidades y demás:
 
Mis 20 temas insignes de Barón Rojo:
 
1º) Caso Perdido.
2º) Hijos de Caín.
3º) Siempre estás allí.
4º) Barón Rojo.
5º) Herencia letal.
6º) Resistiré.
7º) Breakthoven.
8º) Con Botas Sucias.
9) El pobre.
10º) El malo.
11º) Tren fantasma
12º) Chicos del Rock.
13º) El Gladiador.
14º) Tierra de nadie.
15º) Concierto para ellos.
16º) Cuerdas de acero.
17º) Los rockeros van al infierno.
18º) Mil años luz (agujeros negros)
19º) Son como hormigas.
20º) Travesía urbana
 
Curiosidades acerca de Barón Rojo, frases y otro material encontrado en la Red:
 
  • Carolina Cortés ha compuesto para otros artistas, por ej. Luz Casal. Al igual que su pareja Sherpa, para El Fary, A. Pantoja, Paulina Rubio, etc, trabajos como productor (Coyote Dax, por ejemplo), incursiones en el mundo de la pubicidad, escultura
  • 28 temas en los que participó en la composición, según Metal Archives, dato que hemos constrastado minuciosamente:

     metal-archives.com/artists/Carolina_Cortes

Entrevista a Armando: “¿De qué errores se arrepiente más en esos 35 años? Lo mal que negociamos nuestra renovación de contrato con Zafiro-Chapa, cuando teníamos una oferta de EMI Odeon. Eso marcó un poco el principio del fin, nunca nos recuperamos del todo. Fue un jarro de agua fría sobre las ganas de hacer música y las ilusiones.”

 
“El resultado de este disco fue histórico para una banda española. 1,2 millones de copias vendidas, ascendiendo al número 1 en los 40 Principales con `Los Rockeros Van Al Infierno´ y al número 6 con `Resistiré´ «
“Lo más curioso es que el mencionado single de `Resistiré´ fue NÚMERO 1 en el Reino Unido por encima del `Goodbye To Romance´ de Ozzy Osbourne o del `Assault Attack´ de su colega Michael Schenker.”
 

“Barón Rojo murió cuando Sherpa y Hermes se marcharon.” (Anfetamina & Rock)

  • “Smog” (en la canción “El baile de los malditos”, “Huyen del paro y del smog”. Smog: “Nube baja formada de dióxido de carbono, hollines, humos y polvo en suspensión que se forma sobre las grandes ciudades o núcleos industriales.”)
DISCOGRAFÍA BARÓN ROJO.
 
Álbumes de estudio

Álbumes en vivo

Recopilatorios

* Créditos/fuentes/imágenes:
Fotos que aparecen en este reportaje, sacadas de internet. La mayoría tiene procedencia y autoría concreta y se especifica en el pie de cada archivo. 
Libro «Barón Rojo. La leyenda del Heavy Metal español» del periodista Mariano Muniesa (Quarentena Ediciones, 2.013) / Diversos artículos y consultas de internet.

Billete de primera al vuelo incial del Barón:

Especial B.R. parte 1

Reportaje de: Pablo Alarcón «Aliscar»

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *