¡A La Trinchera! Noche de rock y folk en Málaga.

¡Estuvimos en Málaga y lo pasamos "como Dios"!

Soplete en vivo de Lèpoka + Salduie + Crummy en Málaga (Sala La Trinchera), el pasado 1 de noviembre de 2024.

Una vez más, JOS y PLK tuvieron la suerte de que les tocara, soplete en mano, poner rumbo a Málaga, para vivir una noche mágica de la gira por el sur (enlazaron Granada, Málaga y Murcia) de Lèpoka, acompañados por Salduie y con la participación del grupo local Crummy. 

Como reza el lema de la gira, lo pasamos «Como Dios» y aquí os lo vamos a contar.

Crummy rompe el hielo.

Músicos expertos, banda reciente.

    Comenzamos la noche con buena compañía en la cola, se nos hizo ameno el tiempo de espera viendo vídeos de Rammstein y charlando con los asistentes. Se veía venir lo que nos esperaba, porque los ánimos y el ambiente ya te invitaban a disfrutar.

Y salen al escenario Crummy que es una banda formada recientemente, pero con unas bases muy buenas, se nota que son músicos de primera, resultó muy completo el espectáculo. Quiero resaltar, sobre todo, la potente voz de Kiko Romero, que le da mucha fuerza a los temas y roza esa mezcla de hard y melódico que tanto atrapa.

El líder del grupo, Víctor (más de 25 años de trayectoria musical), ex de Anubis, y de Retaliator, mostró su saber hacer en el escenario, puesto que se hacen notar sus galones musicales en escena.
 
También tengo que decir que el guitarra, Javier Lucena, nos dejó gratamente impactados, ya que Sonó de auténtico lujo con sus mezclas de sonido enlatado metálico que, al final, nos llevaron a su terreno.

La temperatura fue subiendo rápidamente, tanto en sentido figurado como debido a la potencia de la descarga de Crummy, que iba aumentando en intensidad hasta llegar a su punto álgido con «El mal», adelanto de su próximo álbum, que me encantó.

Desde ahí, todo fue rodado, llegando a «Sin Ley», un tema que me encantó, y acabando con «Falsos poetas», que terminó por volvernos locos a todos.

Realmente se nos hizo muy corto. A ello contribuyó que la elección de los temas fue espectacular, el setlist fue simplemente brutal, yendo de más a más.  No se puede pedir más en menos tiempo.

Salduie en continuo crecimiento.

Conciertazo de los maños en una noche pletórica.

   Y si la noche apuntaba maneras, las expectativas que teníamos que eran muy altas, fue aún a más, la entrada en escena de Salduie, es uno de esos inicios que se quedan en la memoria, musicalmente hablando. 

Aunque hay que decir, para ser justos, que en los primeros segundos hubo algún problemilla en el sonido, pero nada importante. En seguida todo quedó arreglado y el resto del concierto fue como la seda, y esto no mermó fuerza al comienzo de la actuación.

Antes de llegar a Málaga, nos enteramos de que, por un tema leve de salud, David Serrano no podría hacerse cargo de la gaita ni las flautas, pero que era sustituido de urgencia por Clara Palomares (Celtibeerian y ex-Ekyrian), quien en apenas un par de semanas se hizo con todo el repertorio y les acompaño a Granada, Málaga y luego iría a Murcia.

Pero será que entre los buenos se entienden fácil, pero no se podía tener más conexión entre ellos. Transmitían poder, buen rollo y ganas de comerse el escenario, confirmando lo que ya contamos de ellos este año en nuestras crónicas del Liruprint Fest (que podéis leer AQUÍ), y del Z! Live Rock (que también os dejamos AQUÍ).

Los agudos vocales, tomaban giros muy conocidos por los apasionados del género. Las dos voces de Diego y Nehemías compaginan perfectamente y ofrecían dúos vocales que hacían temblar el suelo.
 
Su repertorio es un dechado de todas las virtudes que puede ofrecer la música folk, con armonías que te atrapan y te hacen sentir que estás en el escenario junto a ellos, o en medio de un bosque, junto a la hoguera, escuchando las historias de batallas de boca de los jefes de la tribu.
Cuando sonó «Dios de las tinieblas», el público se volvió loco con ellos, Nehemías no sólo canta sino que lo da todo con su gaita, flauta, y todo lo que le pongan a tocar, Los duetos de gaita con Clara eran hipnóticos y frenéticos, haciéndonos botar con sus sones celtas.
 
De nuevo se hizo corto el tiempo , sobre todo en los momentos en los que sonaban dos gaitas a la vez. El final de fiesta, con las gargantas del público coreando a una el estribillo de «Hidromiel», fue magnífico. Y ellos, disfrutándolo en el escenario tal y como tenían programado. Espectacular de principio a fin.

Lèpoka reventó La Trinchera.

Los de Castellón, fueron a por todas en su concierto, con dedicatoria especial a sus paisanos levantinos.

   Como la bajada por las escaleras desde los camerinos hasta el escenario, se realiza a la vista del público, desde los preparativos previos al comienzo del espectáculo ya se palpaba en el ambiente las ganas de que comenzasen con la esperada canción «Dios está borracho». Y una vez que ocuparon el escenario, todo fue un fluir de placer.

También muy celebrada (como no podía ser menos), tras una muy bonita presentación por parte de Dani, «Pandemonium», que hizo que los allí presentes hicieran unos coros que bien podrían haberse grabado para una futura edición deluxe.
Cuando sonaban los primeros acordes de» Donde vas», Dani se hizo kilómetros saltando y corriendo frente a su público entregado como siempre y con una energía de quien se sabe triunfador al ver reflejada esa alegría en la cara de la gente, que canta a pleno pulmón cada uno de sus temas.
 
En esta gira, la puesta en escena de cada uno de los temas, está muy bien trabajada, lo que unido a los ritmos ska característicos de Lèpoka, te lleva a que empieces a saltar y a levantar los brazos moviéndolos de lado a lado y ya no puedas parar.
Anécdota: en esta ocasión, Dani no se recogió el pelo en coleta como hace  casi siempre… hacia muchísimo calor y aun así con las carreras que se pegó, seguía con su melena al aire. 
 
Un tema que sí hay que decir, es que los gases y humos que emanan las máquinas de niebla (el famoso hielo seco, supongo), nos hizo pasarlo fatal al inhalarlo. Y es que la cantidad de máquinas y la cercanía al público, dado el tamaño de la sala, resultó excesiva.
Aunque el tamño del escenario o de la sala no parece importarle a ellos, les da igual todo y ofrecen un espectáculo completo, lleno de detalles muy estudiados que siempre sorprenden, como el arco luminoso de Daniel Fuentes, por ejemplo.
 
En esta ocasión, como no podía ser de otra forma, Dani se puso algo serio al hacer su habitual alegato a favor de la Sanidad y, en general, los servicios públicos antes de cantar «A las calles».
Y es que la tragedia que aún hoy se sigue sufriendo debido a la Dana, a ellos les toca muy de cerca, obviamente. Una gran ovación merecida y un tema que cantaron y se coreó con rabia y mucha energía.
 

El colofón del último tramo del espectáculo, no puede dejar a nadie indiferente, porque la elección  de los temas es un acierto y son de las canciones que más pude disfrutar.  Con «Seguimos en pie»  el público se volcó, no se dejaba de saltar y corear sus letras. en la sala…

Pero todos sabíamos que luego quedaba un tema que se ha convertido en santo y señal de Lèpoka. Efectivamente, los sones de «Yo controlo», acabaron por descontrolarnos, rematando finalmente con el estribillo de «Dios está borracho» para cerrar definitivamente el concierto y la noche.

Un concierto en el que el grupo siempre estuvo conectando con el  público. No puedo describir lo vivido en esos momentos en los que estaban como siempre suelen estar: magníficos. Perfecta elección de temas, buen sonido, y fin de fiesta que nos dejó muy arriba emocionalmente hablando. 

Y para despedir esta crónica, sólo puedo decir que «seguimos, seguimos, seguimos en pie».

En pie, y disfrutando mientras recordamos esta maravillosa noche, mirando la galería de fotos que os dejamos a continuación.

Toxikull en la Sala X (Sevilla), 3/5/2024

¿Más crónicas de conciertos? En nuestra sección Soplete en vivo. Y recuerda que siempre puedes estar al tanto de todos los conciertos en nuestro Calendario EdeM, primorosamente actualizado por la genialérrima Mía Wallace.

¡Hasta el próximo metal-sarao, metal splinters!

Texto: PLK.

Fotos: JOS.

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